No quiero guardar tantos secretos, ni estar enfrentado en un cuadro grotesco, como los Montesco y los Capuleto, no quiero a tu edad quedar obsoleto.
Ni perder el vigor, ni decir sin rigor que todo tiempo pasado siempre fue mejor, ni llegar a mi casa ofuscado y molesto, no quiero estar cansado de llevarte puesto.
Y aunque esta verdad pueda doler tengo que decirlo, sin complacer. pero si ofendo, pido perdón. Cuando sea grande, no quiero ser como vos.
No quiero cometer tus mismos errores, ni creer que todos son estafadores, no quiero manejar tus mismos valores, ni que cada día sea igual a los anteriores.
No quiero no poder controlar mis enojos, ni cargar esa tristeza en los ojos, mojados y rojos, ajados y flojos, no quiero resignarme a ser mis despojos.
Ni echar con vehemencia la culpa a los demás de lo que es mi incumbencia y responsabilidad, ni que me de por probar en alguna idiotez, lo que no pude hacer cuando tuve 23.
Y aunque esta verdad pueda doler tengo que decirlo, sin complacer, pero si ofendo, pido perdón.Cuando sea grande, no quiero ser como vos.
No quiero que ya nada me provoque placer, ni que cuando el dolor me toque evoque el ayer, ni mirar fotos viejas y ponerme a llorar o que nombren a alguien y empezar a temblar.
No quiero llevar esa vida mal trecha con sospechas de dolo y la ilusión desecha, ni lanzar pestes creyéndome Apolo, ni que me moleste en una fecha estar solo.
Y aunque esto se preste a mal interpretar, no quiero que crean que es sólo por criticar y espero que tan solo sea una declaración porque ni yo se si quiero que quiera ser como yo.
Y aunque esta verdad pueda doler tengo que decirlo, sin complacer, pero si ofendo, pido perdón. Cuando sea grande, no quiero ser como vos.
Y aunque esta verdad pueda doler tengo que decirlo, sin complacer, pero si ofendo, pido perdón. Cuando sea grande... .
No hay comentarios:
Publicar un comentario